Las hadas cuidan de árboles, plantas y flores y en general de todas las criaturas indefensas, aunque los gnomos les alivian bastante el trabajo ocupándose del bienestar de los animales a los que cuidan, alimentan y curan cuando están heridos o enfermos.
Los duendes son criaturas alegres y traviesas, compañeros inseparables de las hadas, también ayudan en lo que se requiere, pero su naturaleza independiente, su curiosidad y espíritu travieso y aventurero, los mete continuamente en apuros y las hadas y hasta los gnomos los paran sacando de apuros y enmendando sus estropicios. Son ellos por su descuido, a los que más ven los humanos y muchas veces les temen sin razón alguna, aunque sus travesuras pueden ocasionar perjuicios, las hacen sin maldad, pues son incapaces de hacer daño,